Día 212
Comentando lo que me
despierta la lectura de:
Brown, Dan: El Código Da Vinci. Barcelona, Ediciones Urano (Books4pocket), Trad. Juanjo Estrella, 2003.
Brown, Dan: El Código Da Vinci. Barcelona, Ediciones Urano (Books4pocket), Trad. Juanjo Estrella, 2003.
La imaginación e
ingenio de los seres humanos, amigos, enemigos, novios, amantes, etc. Para
comunicarse de formas privadas, secretas, son tan variadas que sería complicado
saberlas todas que van desde los textos con tinta invisible, símbolos, señas,
claves, etc.
“ […] entre los
numerosos talentos artísticos del genio estaba su habilidad para escribir al revés,
de manera que lo que escribía resultaba prácticamente ininteligible a toso el
mundo.[…]” (p.447)
Y entre una de las
más ingeniosas y divertidas es esta que trata de la difícil tarea de escribir
al revés. Seguramente en algún lugar has visto u oído de esta forma, en donde
es necesario colocar en texto frente a un espejo para poder descifrar el
mensaje.
Así que esto de los
secretos es algo que nos ha llevado, nos lleva y llevara a buscar nuevas o mejores
formas de transmitirnos secretos. Aunque creo difícil encontrar nuevas formas
de para hacerlo bien valdría la pena intentarlo con una de las ya existentes. [1]
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